sábado, 5 de diciembre de 2009

¿Es acertada la nueva ley?

Buenas tardes, hoy trataré de contestar bajo mi punto de vista a un tema de actualidad.

En realidad, ¿tenemos todos claro el concepto de aborto?

Antiguamente se usaba esta palabra para referirse a lo contrario de nacer. Por lo tanto, el aborto es la interrupción del desarrollo del feto durante el embarazo, cuando éste todavía no haya llegado a las veinte semanas.

Sobre el punto de la ley que permite a las chicas de 16 años abortar sin el consentimiento de los padres, según el Gobierno lo que se intenta conseguir con esto es: "proteger la salud de las jóvenes y evitar a toda costa la clandestinidad e inseguridad".

Quizás, esta afirmación tenga gran parte de razón sí, pero ¿clandestinidad, inseguridad?

Creo que una joven de 16 años, tiene capacidad de sobra para realizarse esta pregunta mucho antes de realizar el acto sexual, y de esta forma hacer uso de los métodos anticonceptivos con los que contamos en la actualidad, de esta manera se evitarían numerosos abortos. Aún así una vez que una chica, de 16 años o cualquier otra edad está embarazada creo que nunca debe existir la pregunta de, ¿debo abortar?

Esta pregunta tan solo deberían preguntársela los profesionales sanitarios, pues pienso que tan solo a de abortar una mujer cuando verdaderamente, el no hacerlo pueda perjudicar su salud.

En mi opinión, la utilidad que se le daba a la palabra abortar antiguamente como ya mencione anteriormente (“antiguamente se usaba esta palabra para referirse a lo contrario de nacer”) es justo el concepto que nosotros deberíamos asociar al escuchar esta palabra, pues al interrumpir el desarrollo del feto, evitamos el nacimiento de un ser humano, que se dice fácil pero es algo muy serio y complejo para que muchas personas lo utilicen como método anticonceptivo.

Para finalizar, y ahora refiriéndome en particular sobre la nueva ley del aborto sobre las jóvenes de 16 años, pienso que si que tienen la consciencia suficiente para abortar, pero pienso que antes de llegar a este punto siempre y cuando no sea necesario por motivos sanitarios, deben hacer uso de la ética para evitar hacer uso del aborto y asumir las consecuencias de sus actos.